Por defender a España y a los españoles de la invasión y okupación extranjera
Introducción.
Hoy juzgarán en la Audiencia Provincial de Málaga a nuestro colaborador y amigo, don Jesús Calvo Pérez, benemérito sacerdote, con más de 50 años de servicios, para quien la Fiscalía del Odio pide tres años de prisión, y una multa de 3.000 euros, por sus artículos y declaraciones sobre la excesiva inmigración que España padece.
Se juzgará también a otro sacerdote, don Custodio Ballester, por un artículo sobre el Islam, y al director del diario Alerta Digital, don Armando Robles, para quien se piden cuatro años y medio de prisión, y el cierre del digital, por entender la citada fiscalía “que transmite mensajes de odio”.
Nuestro apoyo para todos ellos, pero muy especialmente a don Jesús Calvo, a quien queremos homenajear con este artículo.
Con la finalidad de que nuestros lectores conozcan sus razones y argumentos, que nos parecen del todo válidos, vamos a reproducirlos a continuación, escritos de su puño y letra, y sin añadir ni quitar una simple coma.
¡Qué triste es que esas Fiscalías del Odio solo vean delitos a estribor, pero todo lo que se hace a babor es “libertad de expresión”, incluidas las ofensas a la Iglesia Católica, a España, a la Corona, etc.!
Nota Bene.
Con posterioridad a redactar el texto introductorio, y transcribir este artículo, recibimos la noticia de que el juicio se ha suspendido, por imposibilidad de asistencia del abogado del padre Custodio Ballester, al tener otro juicio señalado, y con prioridad de celebración.
A este paso, el juicio se acabará celebrando junto con el Juicio Final, por acumulación de autos.
Sirva, en cualquier caso, esta información de recordatorio y homenaje a los padres Calvo y Ballester.
¡Va por ustedes, amigos!
Respuestas del Padre Calvo a las acusaciones en su contra:
1ª. Rechazo rotundamente el concepto de ODIO contra los emigrantes o inmigrantes ilegales de que se me acusa, por ser un concepto totalmente INADECUADO E IMPROPIO para el caso tratado.
2ª. No se puede identificar una denuncia legal, ordenada y documentada, con una declaración de Odio, a unas personas a las que se las reconoce como intrusos ilegales (aunque sean engañadas por las mafias y abandonadas después al mar), con odio personal hacia las mismas. El odio supone ataque persecutorio y destructivo hacia lo que se dice odiar y mal se puede odiar a quien no se conoce. Las vallas de Ceuta y Melilla, ¿son declaración de odio?
3ª. Mal se puede odiar a quienes siendo ilegales, que han llamado a mi puerta, como a la de tantos sacerdotes, pidiendo limosna porque dicen que no tienen trabajo, les he ayudado sin decirles ni una palabra de desprecio a su situación actual, y es más, compadeciéndome y rezando por ellos, como corresponde a mi Ministerio Sacerdotal y a mi fe católica.
4ª. El concepto de ODIO tiene en filosofía ética clásica, como en concepto moral teológico, tres acepciones:
- El concepto vulgar se hace como una simple indiferencia o distanciamiento hacia una persona, por ejemplo: “tal persona es odiosa, porque es inoportuna, pesada, aburrida, desagradable”.
- El concepto amplio, odio significa preferencia de una cosa o acción, por otra mejor; por ejemplo: “tal oficio o trabajo es odioso porque es peligroso, se tributa mal, lo que no se reconoce extinguible porque alguien tiene que hacerlo”.
- Y el concepto estricto, odio significa persecución y extinción de aquella cosa o persona que se dice odiar.
Esto es lo que prohíbe el quinto Mandamiento de la Ley de Dios, que coincide con la ética racional.
5ª. Ni he pedido persecución, ni mucho menos extinción de nadie por ilegal que sea como intrusista en naciones ajenas.
Lo ilegal es denunciable por todas las consecuencias adversas que trae sobre la población, que por eso es ilegal.
6ª. Son seis, al menos, las consecuencias adversas de estas ilegalidades:
- Peligros de inseguridad pública, dadas las condiciones delictivas de gentes que no tienen nada que perder.
- Competencias desleales contra nuestros agricultores, que se encuentran con jornales de esclavitud, como está sucediendo en EE.UU. con los ilegales mejicanos.
- Peligros sanitarios porque vienen sin certificados médicos y nos pueden introducir enfermedades desconocidas o ya extinguidas en nuestra Patria.
- Peligros de camuflar terroristas y fanáticos peligrosos, haciéndose pasar por inmigrantes.
- Peligros de proxenetismo, cuyo tema ha sido expuesto en el Senado, recientemente.
- Mientras este descontrol invasivo no se evite, se genera el efecto “llamada”, con lo cual, el mal no se ataja, sino que se incrementa.
7ª. La “basura que no va a Israel”, hace alusión a la masa humana amorfa e incapacitada laboralmente, y desfavorable a la sociedad occidental, mercantil.
No es despectivo, sino reconocer que muchos de ellos no tienen ni los estudios ni la formación o experiencia necesaria para ser útiles en nuestra sociedad.
8ª. “Actuar contra los musulmanes” hace referencia a exigir a la legítima autoridad a evitar y poner freno a esa trashumancia ilegal y antisocial, que se convierte en invasión práctica, según los planes secretos y masónicos del plan “Kalergi”, cuya documentación está en mis libros.
9ª. “Traer piojos” hace alusión a lo dicho sobre peligros de salud, por falta de higiene en esas olas de extranjeros que arriban apiñados en rebaño.
Y no es injurioso, sino meramente descriptivo de la realidad.
10º. – “Dar la razón a Hitler” significa el cumplimiento de sus predicciones de futuro, como lo demuestran los “Protocolos de los sabios de Sión”, que se están cumpliendo al pie de la letra.
Visión profética de futuro sionista.
Cuando eso dije, estaba pensando en sus escritos de conocimiento preciso del estado político del mundo de su tiempo.
Si ustedes han leído los escritos de este hombre en su detallado “Mein Kampf”, verán la visión de los problemas del mundo de su tiempo.
No me refiero a todo lo demás que pudo pasar tras la segunda Guerra Mundial, con sus exageraciones y desacuerdos entre historiadores.
Soy filósofo, y no investigador histórico.
11º. – Oponerse a la inmigración ilegal, como a todo lo que es ilegal, sí es conforme y obligado de la doctrina católica y exigencia de la ley natural, como lo es la legítima defensa personal y nacional.
La Justicia, está antes que la caridad.
Don Jesús Calvo Pérez
Párroco de Villamuñio, León, y Capellán de La Falange Leonesa
(Introducción y transcripción de Ramiro Grau Morancho)
Me alegro de que este juicio se suspenda.
Seguiré rezando para que sea absuelto
Los fiscales y jueces de estos “delitos de odio” deben de leerse el Coran y después de absolver al Padre Calvo, deben ellos mismos ser juzgados por ese mismo “delito de odio”, IMPROCEDENTE – el del Padre Calvo, se entiende –
Resulta inconcebible que un juez se atreva a juzgar a un sacerdote de Cristo.
Viva Cristo Rey
Solo DIOS y PATRIA