El presidente titular de los Estados Unidos, Josep Biden – antes Pepito – se acaba de reunir con su homólogo chino, Xi Jinping, para tratar de múltiples aspectos de las vidas tanto de americanos como de los chinos.

Al final como se aburrían abordaron la dramática cuestión del fentanilo droga que los mierdas de comunicación califican como zombie.

Que si Taiwan, que si Ucrania, que si Palestina, que si Putin…, cuestiones irresolubles para al final dedicarse a su pueblo, el americano, ninguneado, vituperado y, por supuesto, drogado… drogado, abducido, por los mierdas habituales y ahora, más que nunca por las drogas de verdad.

Y la droga de moda es el fentanilo al que los periodistas – de investigación – califican erróneamente como droga zombie…, consultada una farmacéutica me describe esa droga como la mezcla de dos legales, el ya indicado, fentanilo, y el anestésico para caballos, la xylazine…, este producto de uso veterinario y el antes mencionado se venden en oficinas de farmacia, por supuesto, siempre con la receta de un facultativo.

Josep y Xi

El senil Josep aparcado por el presidente Obama en tareas menores ha conversado con Xi sobre esa droga de la que los gringos acusan a los inocentes chinos de introducir cantidades ingentes en los Estados Unidos y en varios países americanos desde donde los traficantes antes de heroína, cocaína o metanfetaminas, reconvertidos al fentanilo consiguen forrarse a costa de los pupilos de Josep.

La gran pregunta a Xi es ¿por qué los chinos no tienen problemas de drogas ni, tampoco, hay ni carteles, ni traficantes?

Respuesta sencilla, rápida y lógica: “A los traficantes los ajusticiamos”…

La siguiente pregunta y obvia: ¿por qué en China no hay violaciones?

Respuesta de Xi, sin pensárselo dos veces: “A los violadores los ajusticiamos”…

Moraleja: Los problemas NO se resuelven porque los que gobiernan los países democráticos y occidentales NO quieren… NO quieren.

Para ellos es muy cómodo convivir con drogadictos, traficantes y violadores porque son ajenos a los problemas que podamos tener nosotros.

Los carteles de la droga confraternizan con las organizaciones como la CIA, los políticos compadres de los traficantes y, por encima de todo, porque los que dirigen nuestras vidas, además de unos canallas, son consumidores…

La resolución de los conflictos o problemas no interesa a nadie.

La droga consigue dos objetivos, el primero disminuir la población sobre todo de jóvenes y tener a la gente preocupada y atemorizada por sus consecuencias en cuanto a la inseguridad en las calles y que en muchas familias el problema se encuentre en ellas mismas.

La solución china

Los expertos occidentales ven imposible la solución china de ajusticiar a los traficantes…

Sin embargo, hoy, dado el estado de la Justicia – o lo que sea – en ese occidente corrupto y, aunque se aumenten las penas al tráfico, esa Justicia se encargará por la vía de los sobornos de que las penas sean reducidas o insignificantes.

Sin mencionar la simbiosis de traficantes, políticos y banqueros que ante el dinero que produce o se mueve, prefieren mirar hacia otro lado porque todos los implicados en este negocio son compinches o socios.

Imagínense después de colgar a media docena de traficantes y dar las imágenes por las TV’s vendidas… ¿el tráfico no se iba a parar? Por supuesto.

El fentanilo

Hay que precisar que es un medicamento y que como tal cumple una función.

Pensamos y las personas que conocen el fentanilo que, evidentemente, son los farmacéuticos que trabajan en los análisis, en su industria y en la investigación, son los que por la Ley se encuentran capacitados para describir la molécula, sus efectos en la salud de los pacientes y las consecuencias de una sobredosis que, si se consume sin control médico/farmacéutico es mortal.

También, en otro post, la farmacéutica que nos asesora en temas correspondientes a la salud nos explicará que el tratamiento de una hipotética sobredosis es con naloxona otro producto farmacéutico que en Europa se vende con receta y en Estados Unidos es de venta libre dada la magnitud de la crisis del fentanilo.

En términos sencillos y vulgares la naloxona es el “antídoto” del fentanilo.
La experta nos advierte que la naloxona NO funciona cuando el fentanilo se mezcla con otras drogas como la cocaína o el anestésico veterinario xylazine.

La naloxona funciona solo con los opioides, por ejemplo, heroína, morfina y codeína y sus mezclas.

Los problemas de sobredosis en los casos de medicamentos – legales – se resuelven con facilidad; sin embargo, en las drogas ilegales al ser mezclas sin control alguno y desconocer sus componentes, la resolución de las sobredosis es, en la práctica imposible. Y la naloxona NO funciona.

Sagrado Corazón de Jesús en Vos confío

DIOS, PATRIA y REY LEGITIMO

 

Iñigo Caballero

I. Caballero