En Aragón vivimos un millón trescientos y pico mil personas, de los que casi medio millón son extranjeros…
Unos 800.000 nos concentramos en Zaragoza capital, que no para de crecer, mientras que toda la provincia de Zaragoza, escasamente alberga a 200.00 personas.
Es decir, sufrimos de una macrocefalia, pura y dura.
La autonomía solo ha servido para trasladar el centralismo de Madrid a Zaragoza, de forma que nada se cuece fuera de la capital, y todas las instituciones se ubican aquí: Gobierno, Cortes, Justicia de Aragón, Consejerías, etc.
¡Y claro, lo que suceda en la provincia, no le interesa a nadie!
Una buena parte de la provincia ha sufrido graves tormentas de granizo, que han provocado grandes daños, con pérdida del suministro de agua corriente, electricidad, etc., pero eso no le preocupa ni al gobierno pepero, ni a la diputación provincial, socialista, ni a la comarca de Belchite, que no sé de qué pie cojea, pero da igual, pues nadie ha movido ni un dedo para ayudar a esos convecinos y contribuyentes, muy contribuyentes.
Siento vergüenza ajena de ser aragonés, viendo que nuestras instituciones, tan preocupadas por enchufar a gente incompetente en nómina, pasan de todo, pues se han convertido en un fin en sí mismas, cuando su deber es estar al servicio de los ciudadanos, y no al revés.
Hoy leo en la prensa regional que, al parecer, se va a enviar a empleados de SARGA, una de las casi cuarenta empresas públicas que tiene la autonomía, a ayudar a los afectados.
¡A buenas horas, mangas verdes!
Pero claro, no iban a hacer algo durante el fin de semana, que las fiestas son sagradas, y más en esta época casi veraniega, que lo primero es lo primero!
SARGA, Sociedad Aragonesa de Gestión Agroambiental, por la visto es la “oficina de colocación” del PAR, Partido Aragonés Regionalista (no sé si han suprimido el segundo apellido), y da empleo a más de mil quinientas personas, es decir, a más del uno por mil de la población aragonesa.
Se dedican a cuidar los montes, el medio rural, el agua, la agricultura, la ganadería, el medio rural…, y los grandes expresos europeos.
Es decir, a todo y a nada.
Pero, por lo visto, el fin de semana no ayudan a nadie, o no ha habido una orden superior de que actúen.
En fin, vecinos de la comarca de Belchite, y otras zonas gravemente afectadas, ¡va por ustedes, amigos!
Espero que este artículo no caiga en saco roto, y sirva para algo.
Ramiro Grau Morancho
Académico, jurista y escritor