Letizia Ortiz Rocasolano, ya no podrá ser Regente de España a partir del próximo día 31 de octubre.

Y quedará reducida al papel de segundona, que no se resigna a tener, pero es el que le dispone la Constitución del  78.

Salvo que los separatistas catalanes, o vascos, la nombren Presidenta de sus Repúblicas correspondientes, que todo podría ser.

Al fin y al  cabo, es progresista, moderna, empoderada, divorciada, dicen que dos veces abortista –según el libro de su primo-, y le debe todo su “éxito” a su marido, vamos, la típica mujer feminista…

En efecto, el  próximo día 31 de octubre doña Leonor, Princesa heredera, jurará la Constitución ante las Cortes, y consiguientemente a virtud del artículo 59, 2, de la Constitución: “Si el Rey se inhabilitare para el ejercicio de su autoridad  -Dios no lo quiera- y la imposibilidad fuere reconocida por las Cortes Generales, entrará a ejercer inmediatamente la Regencia el Príncipe heredero de la Corona, si fuere mayor de edad. Si no lo fuere, se procederá de la manera prevista en el apartado anterior, hasta que el Príncipe heredero alcance la mayoría de edad”.

Sobre el papel de doña Leticia –para mí con c,  aunque desconozco si ha cambiado su nombre en el Registro Civil-, el art. 58 le da un papel de segunda, por no decir de tercera, al decir que: “La Reina consorte o el consorte de la Reina no podrá ejercer funciones constitucionales, salvo lo dispuesto para la Regencia”.

Yo mando en mi casa…, cuando no está mi mujer, y creo que a don Felipe VI le pasa lo mismo.

En muchos actos públicos, y más, vista su tendencia a dar la nota por donde pasa, parece que el Rey en realidad es el  consorte de Leticia Ortiz Rocasolano, y no al revés.

En fin, todo  son malas noticias, pero al menos el día 31 de octubre tendremos una buena.

¿Se imaginan ustedes a doña Letizia Ortiz de Regente de España, en una situación cómo la actual…?

 

Ramiro  Grau Morancho

Académico, jurista y escritor

https://www.ramirograumorancho.com

Ramiro Grau Morancho