En España ya lo tenemos encima, “a la tercera va la vencida”, según expresión de la exministra socialista María Luisa Carcedo que fue la encargada de defender el desprecio de la dignidad de la vida y el poder del Estado de determinar qué vidas son útiles, ¡para el Estado, claro!
La hoja de ruta se va cumpliendo y este siguiente mojón revolucionario, que es la eutanasia, ya está en las puertas de su legalización, que no en su puesta en práctica que, por desgracia, ya se viene aplicando bajo la apariencia de paliativos, todo es cuestión de dosis, desde hace tiempo en nuestros hospitales según dolorosos testimonios muy cercanos.
Naturalmente la exministra y toda la patulea progre disfraza todo el discurso de defensa de esta abominación con el sentimentalismo más vomitivo y asegurando las máximas garantías en su aplicación, y uno se pregunta si puede quedar alguien que se crea, a estas alturas con la experiencia de los coladeros con el divorcio y el aborto, la cantidad de patrañas y mentiras que vierte toda esta gente sin inmutarse lo más mínimo.
Sin embargo en nuestro país vecino Portugal, no sabemos si algo tendrá que ver la Santísima Virgen en su advocación de Fátima, los comunistas en un alarde de sentido común han argumentado, en su parlamento, en contra de esta misma nefasta ley, argumentario que pueden escuchar en el vídeo.
Y es que el sentido común no es patrimonio de derechas o de izquierdas; o se aplica o las fantasías más descabelladas que puedan concebir algunos descerebrados llevarán a la humanidad a desastres que ni el nazismo ni el comunismo llegaron a alcanzar nunca aunque marcaran ambos la hoja de ruta que siguen fielmente los progres de hoy.