Acabo de leer que la Montero más joven (las dos son malas, y bastante analfabetas), dice que hace falta una nueva Constitución, feminista…
Estupefacto me he quedado, sobre todo de ver que la inútil ésta quiere ser el nuevo Sánchez Agesta del constitucionalismo español. (Obviamente, no tiene ni idea de quién era don Luis Sánchez Agesta, eximio catedrático e intelectual).
Pedro Sánchez, el doctor cum fraude en economía –por la Universidad Camilo José Cela, por cierto-, y que no deja de ser un bluf, como la mayoría de su gobierno, y todos los de Podemos, Sumar o Restar, se ha rodeado de un atajo de indigentes mentales, que espero sepan vestirse solos, y atarse los cordones de los zapatos… Y poco más.
Ha inaugurado así una nueva etapa de los gobiernos españoles, y ya llevamos cinco años soportándoles, que pudiéramos definir como el tontismo, como forma de gobierno.
Cuando el propio presidente del gobierno es un indigente intelectual, que suple con grandes dosis de maldad, la banda de ministros y altos cargos es, realmente, lamentable.
Con algunas excepciones, pero que son eso, excepciones, y no la regla general.
Entre ellos brilla con luz propia Irene Montero, un espécimen raro de encontrar, rarísimo, a Dios gracias, pero que cree ser el Oráculo de Delfos.
Es lo que pasa con las personas ignorantes, que creen saber de todo, y pontifican de cualquier asunto, pues siempre se ha dicho que la ignorancia es muy atrevida.
Y es verdad.
De cualquier forma, esta ex cajera de supermercado, no pasa de ser una simple anécdota, pues el culpable último de su nombramiento y permanencia en el gobierno, se llama Pedro Sánchez.
En fin, no voy a seguir, pues tengo ganas de vomitar.
Ramiro Grau Morancho
Académico, jurista y escritor