MANIFIESTO:

 

El pasado mes de febrero representantes de las asociaciones TAS-Raíces, El Criterio, Valentia
Forum y Somatemps, iniciaron conversaciones para la creación de una Coordinadora de entidades
socioculturales. Un proyecto en el que se está trabajando para sentar las bases y extenderlo a otras
entidades con semejantes finalidades.

En un primer comunicado ya se informó que la línea de actuación va a ser siempre en el terreno
cultural y metapolítico. Por lo que, sin prejuicio del proceso que están llevando a cabo, han decidido
posicionarse estratégicamente ante la crisis de la actual pandemia con el siguiente comunicado:

UNA RESPUESTA ANTE LA CRISIS

La pandemia provocada por el coronavirus no es solamente una crisis sanitaria, sino que arrastra
consigo una crisis política, económica y geopolítica, tanto a nivel nacional como mundial. La
mayoría de las (supuestas) certezas que han servido de apoyo al actual “statu quo”, así en España
como en el mundo global, están cayendo por los suelos ante la agresión de la realidad. Frente a todo
ello las asociaciones abajo firmantes proponemos una serie de medidas para que esta crisis revierta
en un proceso de regeneración nacional:

 

A nivel nacional

1.- La estructura autonómica del Estado español, consagrada por el Régimen de 1978, se ha
revelado obsoleta e inútil para enfrentar la crisis. Hay 17 gobiernos autonómicos (algunos en manos
de separatistas que quieren destruir España) y una administración central que no puede asumir la
situación por estar vaciada de contenido. Proponemos el fin del Estado de las autonomías, mediante
la recuperación de las competencias que atañen al bien común (o interés general) y una profunda
descentralización hacia los municipios y aquellas instituciones naturales comarcales y/o regionales,
como las Diputaciones, que cohesionan las necesidades de los territorios.

2.- La mayoría de los cargos públicos han demostrado una absoluta incompetencia pues han sido
escogidos únicamente en función de criterios partidistas. Proponemos una profunda reforma de los
cauces de participación política, donde, más que personas designadas por los partidos se tengan en
cuenta los cuerpos intermedios de la sociedad y estamentos que dimanan de la misma (asociaciones,
colegios profesionales, sindicatos, representación territorial) para desempeñar la representación
política de manera que se puedan incorporar cargos públicos en función de su valía profesional y no
de su adscripción partidista.

3.- La estructura económica de España, uno de cuyos pilares es el sector turístico, ha mostrado una
profunda debilidad ante esta crisis. Proponemos la reindustrialización de España, potenciar sectores
estratégicos como el sanitario, la defensa de nuestra agricultura y ganadería, la centralidad del
mercado interior y la defensa de nuestros productos frente a la competencia de países con bajísimos
costes laborales, aplicando aranceles si fuera necesario.

4.- La recuperación de la soberanía por parte de España es condición indispensable para cualquier
proyecto regenerador. Proponemos la defensa de nuestras fronteras frente al libre comercio (libre
flujo de capitales y de mercancías) y frente a la inmigración descontrolada.

5.- El vergonzoso trato dado a nuestros mayores por las autoridades sanitarias, relegados y
condenados por criterios economicistas, demuestra hasta qué punto la “cultura de la muerte”
(eutanasia, aborto) predomina en nuestra clase política. Proponemos la promoción de la cultura de
la vida, derecho a la vida para todos sin distinción de edad, apoyo a la familia, y lucha contra el
invierno demográfico.

 

A nivel internacional

6.- El fenómeno de la Globalización ha sufrido un duro golpe. Los estados nacionales se han
revelado como los auténticos protagonistas en la lucha contra la crisis, se ha demostrado que las
fronteras SÍ sirven para algo, y se ha visto que el incesante movimiento de personas y de mercancía
ha sido el principal responsable de la extensión de la pandemia a nivel mundial. Proponemos un
replanteamiento de la posición de España frente a este fenómeno.

7.- La supuesta solidaridad de los países de la UE frente a esta crisis ha quedado hecha añicos. La
actitud de los países del norte hacia las naciones mediterráneas ha sido de un desprecio insultante.
Proponemos un replanteamiento de las relaciones de España con la UE, un bloque de países
mediterráneos en alianza con los del este de Europa (grupo de Visegrado) y una postura de dignidad
frente a las imposiciones de Alemania, Países Bajos y otros países nórdicos.

8.- Junto con ello España debe afianzar sus alianzas con los países hermanos de Hispanoamérica,
con el objetivo de crear un eje hispanista que se oponga tanto a la influencia norteamericana como a
las corrientes indigenistas de corte marxistas. Proponemos una profunda revisión de nuestras
alianzas internacionales, tomando conciencia de que EEUU e Inglaterra siempre han sido nuestros
adversarios geopolíticos en Hispanoamérica. La salida de España de la OTAN debería ser una
consecuencia lógica de este proceso.

9.- Las políticas neoliberales, basadas en el individualismo y el darvinismo social, se han revelado
inoperantes frente a esta crisis. Grandes potencias como EEUU, sin sanidad pública, o como
Inglaterra, que pretendía enfrentar la epidemia con medidas basadas en el “laisser-faire” y en el
darvinismo social, se han mostrado muy por debajo en eficacia en comparación con otras
sociedades, como Rusia, donde impera la disciplina colectiva y el patriotismo.

10.- Una nación no puede aspirar a ser respetada si no se respeta a sí misma. Mientras en España
estamos dudando cada día entre seguir existiendo o balcanizarnos en un magma de microestados,
vemos como Marruecos amplía sus aguas territoriales de forma unilateral sin que nuestros
gobernantes den ninguna respuesta. La consecuencia de esta crisis debe ser nuestro resurgimiento
como potencia política y la recuperación total de nuestra soberanía.