La manipulación descarada, espuria, dolosa y criminal del Gobierno social-comunista de la obra de F. Franco, se incardina en los elementos del delito de odio penalizado en el Código Penal. La historia manipulada donde pretenden, con el auxilio de los medios de comunicación trasmitir a la sociedad española que F. Franco fue un dictador criminal, les ha convertido en autores de un delito de odio continuado.

Una persecución que se ha convertido en una causa general, contra el franquismo, no tiene parangón en ningún país democrático.

La lapidación, criminalización ha alcanzado cotas inimaginables.

A la retirada de todos los honores, a la retirada de todos los símbolos, a la profanación del cadáver de F. Franco, se añade ahora la expoliación (que no expropiación) del Pazo de Meirás, y la nulidad de todas las sentencias dictadas durante el franquismo contra los terroristas, así como la revocación de títulos nobiliarios otorgados por el franquismo.

A este Gobierno social-comunista solo les queda, crear un tribunal popular y condenar tanto a los franquistas ya fallecidos, como aquellos otros que todavía viven.

Estos hechos, inciden de manera palmaria en un delito de odio continuado, en una xenofobia sin límites y que debe tener su respuesta dentro del estado de derecho, en querellas ante los tribunales españoles y por supuesto denunciarlo en instancias europeas.

Reseñar finalmente que  la futura aprobación de la denominada, cínicamente Ley de Memoria Democrática, persiguiendo el pensamiento franquista, incluida la Fundación Francisco Franco, refuerza aún más la tesis de que nos encontramos ante un gobierno social-comunista, que no solo no respeta los derechos y libertades, sino que desde su posición de gobernantes, gozan de la  impunidad que le permite cometer un delito de odio.

 

Miguel BERNAD REMÓN

Jurista y Secretario General de MANOS LIMPIAS

Otros Autores