Es curioso, todos los españoles estamos estupefactos e indignados por los precios tan elevados que están alcanzando los hidrocarburos, incluido el gas natural.
Mientras los medios oficiales culpan de todo a Vladimir Putin, gran culpable universal de cuanto ocurre actualmente, los españoles no debemos desdeñar la influencia negativa de la estupidez gubernamental en el precio del gas, dado que en nuestro caso ese gas viene de Argelia, y nuestro país ha ofendido a los argelinos con las recientes declaraciones de Pedro Sánchez en el asunto del Sáhara en el que, sorprendentemente, hemos hecho propio el punto de vista marroquí que nunca habíamos compartido.
Pues resulta que, además de esto, el Consejo Superior de Colegios de Ingenieros de Minas nos dice que en el subsuelo español están enterrados 1,3 billones de metros cúbicos de gas, cantidad suficiente para abastecer de tal fluido a nuestro país durante 40 años. La explotación de ese enorme depósito natural de gas garantizaría el suministro a nuestro país, abarataría los precios y crearía puestos de trabajo para muchos españoles, pero entonces ¿por qué no se extrae y utiliza? La respuesta a tal pregunta está en que hace un año el gobierno social-podemita que sufrimos prohibió por ley la explotación de hidrocarburos, lo que impide legalmente extraer dicho gas.
Así, cuando te llegue tu próxima factura de gas o compres otra bombona y sus nuevos precios te dañen la cartera, no busques al culpable gobernando desde el Kremlim, sino deambulando por La Moncloa (o viajando en el Falcon, que también es posible).
C.R. Gómez